martes, 31 de mayo de 2011

NOS DEJÓ EL PADRINO DEL RAP






Gil Scott-Heron, el artista que sentó las bases del rap en los 70 con el tema 'The revolution will not be televised', ha fallecido en Nueva York a causa de una neumonía. Considerado por muchos como "el Bob Dylan negro", Scott-Heron ha sido una influencia fundamental en los mayores artistas del hip-hop, así como un referente en la utilización de la música para denunciar las injusticias sociales.

Gilbert Scott-Heron nació en 1949 en Chicago, Illinois. La separación de sus padres hizo que su vida transcurriera primero en Tennessee y posteriormente en el Bronx, lugar donde realizó sus estudios secundarios. Su talento para la escritura le valió una beca, que le abrió las puertas de la Universidad Lincoln de Pennsilvania. En 1969 escribió sus dos primeras novelas: 'The Vulture' ("El Buitre") y 'The Nigger Factory" ("La Fábrica Negra"), que obtendrían una gran acogida.

En 1970 edita su primer disco, "Small Talk at 125th and Lenox". El vinilo encierra los temas centrales del discurso de Scott-Heron: la superficialidad del consumismo y la televisión, el racismo de los medios o el abandono de las ciudades del interior. "The revolution will not be televised" ("La revolución no será televisada") será la canción fundamental en su carrera como músico, cantante y escritor.

Esta obra fundamental de Heron -"The revolution will not be televised" ("La Revolución no será televisada")- es una canción de "spoken word" ("palabra"), en la que denunciaba la frivolidad de los medios de comunicación que dejaban de lado los temas realmente importantes. Esta composición es considerada como la pionera del rap, influyendo a artistas que llegarían más tarde tales como Public Enemy, Eminem o Kanye West.

"Pieces of a Man", publicado en 1971, supone la aproximación de Scott-Heron a las estructuras musicales más convencionales, alejandose del estilo "recitado" de su primer trabajo. Para este álbum, el artista utilizó instrumentos eléctricos, saxofón, flauta,  piano y la ayuda de su habitual colaborador, Brian Jackson. "Pieces of a Man" marcaría el estilo de los siguientes discos de Gil Scott-Heron, en los que la música siempre fue el vehículo para lanzar el mensaje social del artista.

El estilo vocal de Scott-Heron era más próximo a la declamación que a la canción en sí. Así lo definíó en su momento, el bajista Ron Carter: "Gil no era un gran cantante, pero su voz hacía que hasta un susurro sonase con dinamismo. Tenía el tipo de voz que hubiese querido Shakespeare".
Scott-Heron era consciente de su título de "Padrino del Rap", pero insistía en que los artistas del hip-hop debían tener un mensaje social en lugar de perpetuar los tópicos del gremio: "Necesitan aprender música", declaraba en una entrevista. "No es lo mismo hablar por encima de una melodía que integrar tus palabras con esa melodía. Con toda su jerga y sus coloquialismos no dejan que veamos a la persona, sino sólo la pose del personaje".

Siempre consciente de los problemas de la sociedad, Scott-Heron llevó su mensaje proactivo desde sus discos hasta sus libros. También fue un pionero en las actividades benéficas, realizando conciertos -en 1979 en el Madison Square Garden- en contra de la energía nuclear, así como la lucha contra el apartheid que reflejó en temas como "Let me see your I.D.", editado en 1985.

En 2010, Scott-Heron publica "I'm New Here", su último álbum y el primer disco que grababa en más de quince años. Este regreso a los estudios de grabación tendría una excepcional acogida entre crítica y público, siendo calificado como uno de los mejores discos de la década.

Los contínuos problemas de Scott-Heron con las drogas llegaron a su punto álgido en 2001, cuando ingresa en prisión por posesión de cocaína. Comienza entonces una sucesión de recaídas y condenas penales, que durarían casi una década. Enfermo de SIDA durante varios años, Heron contrajo una neumonía durante una gira por Europa, de la que no consiguió recuperarse. Gil Scott-Heron fallecía el pasado 27 de mayo de 2011, en el hospital "Saint Luke" de Nueva York.

Numerosos artistas y músicos han mostrado su pesar por la muerte de Scott-Heron, dejando mensajes de condolencias en la Red. El rapero Eminem declaraba: "Gil Scott-Heron descanse en paz. Influyó en todo el hip-hop". Por su parte, Chuck D, fundador de Public Enemy, manifestaba en una red social: "Si hacemos lo que hacemos, y de esta manera, es gracias a ti".

Desanse en paz. Valgan estos dos vídeos, "The Bottle" y "We Almost Lost Detroit ", como muestra de su paso por la vida y la música.

















lunes, 30 de mayo de 2011

LA FOTOGRAFÍA DE GOIO VILLANUEVA

Goio Villanueva
El fotógrafo Goio Villanueva cuelga estos días dos extraordinarias exposiciones, que vienen a ser un mínimo compendio de su extensísimo trabajo en conciertos de música (fundamentalmente, de jazz). La primera de ellas se puede ver en la sala de Murcia capital "La Puerta Falsa", en la que a través de 21 fotografías se puede descubrir el "alma" de los músicos que en ella aparecen. Nombres como Dave Holland; Michel Camilo; Johnny Winter o Winton Marsalis conforman esa selección que ilustra estos días las paredes de esta mítica sala de conciertos de la capital murciana en la que, sobre todo, se puede escuchar música de jazz en directo.


En su segunda exposición, Goio Villanueva nos deja ver otra parte de su obra fotográfica pero con paradas especiales en secciones dedicasas a voces femeninas o algunas de las "Leyendas Vivas" del jazz. Con un total de 69 impresionantes fotos (número interesante donde los haya), Villanueva deja ver a través del ojo de su cámara (prolongación de su visión del concierto) y de su rápido dedo en el disparador de la misma, la magia de cada instante del músico que no necesariamente está interpretando una pieza en su concierto. Parte de esta obra está realizada en las pruebas de sonido que como el propio Goio Villanueva indicó durante la inauguración, "es uno de los momentos más tensos para el artista, porque está perfilando al máximo lo que más tarde venderá al gran público". Esta otra muestra del artista fotográfico, se puede ver hasta el día 31 de mayo, en el bajo de unos amigos, en Orihuela (Alicante), situado casi al lado de la Casa de Miguel Hernández.


En ambos casos, se aconseja visitarlas para comprobar que con una fotografía también se puede disfrutar, además de revolucionar nuestros sentidos.  

Todas las fotos que aparecen en este artículo son obra de Cristina Rives

viernes, 27 de mayo de 2011

EL SILENCIO DE LOS CORDEROS

Anagrama del Festival de Jazz de Murcia
El músico y poeta, Sebastián Mondéjar, ha denunciado en su blog la suspensión del XXXI Festival de Jazz de Murcia (denominado en su momento JAZZ EN LA CALLE) por parte del Ayuntamiento de Murcia (responsable directo de su organización absoluta), sin que la Administración Local murciana haya dado explicación alguna sobre el motivo o motivos que le han llevado a no celebrar esta edición.

Mi amigo Sebastián no es el único -ni una minoría de la sociedad murciana- que se ha visto sorprendido por este hecho. Pero sí ha sido (no conozco cualquier otro artículo o comentario publicado al respecto ) el primero que ha escrito sobre el asunto. Y de qué manera tan expresiva, rotunda y demoledora sin perder la compostura. Porque, en efecto y estoy absolutamente de acuerdo con él, cómo ha dado la nota el Consistorio capitalino con su silencio "tenor".

Tal y como he comentado en el blog de Sebastián, hacia principios del mes de abril pasado, un "pajarito" me pió que el Jazz en la Calle no se celebraría este año. Naturalmente, el pajarito tan sólo pió el hecho pero no los motivos. Para hacer las cosas como es debido, me dispuse a hablar con el responsable directo: el concejal del ramo, Rafael Gómez. No pude hacerlo porque, en aquel momento, "no se encontraba en su despacho. ¿Quién le llama y sobre qué tema desea hablar con él?, contestó su secretaria. Soy Andrés Garrido, periodista (él me conoce, por mi actividad en RNE hasta mi prejubilación) y deseo hablarle sobre el Festival de Jazz. Mi número de teléfono es..." Hasta ahí, la conversación de mi primer y único intento de esclarecer si se iba a celebrar o no el festival y si la respuesta era negativa, el por qué.

Como quiera que me conozco el "percal" un poco, me propuse que si en un plazo de DIEZ o DOCE DÍAS -todo lo más- no me atendía, mi decisión sería denunciar la suspensión del evento y mostrar mi absoluta crítica del "silencio de los corderos" al respecto. Porque uno puede estar atareado en un momento dado y demorarse un poco en contestar a esa llamada. Pero no prestar atención, no ya a un triste periodista si no a un ciudadano y el resto de la comunidad vecinal de la que forma parte, que desea conocer si va a poder disfrutar un año más de su festival de jazz eso, insisto, es de mala educación y de no saber muy bien cuál es la función de un político. Todo ello, claro está, suponiendo que la citada secretaria le comunicase mi mensaje (y no tengo por qué dudar de una funcionaria ya que conozco muy bien lo exquisitamente que llevan a cabo su trabajo y más, en el ayuntamiento de Murcia). Espero no estar proporcionándole la "excusa perfecta" al aludido dirigente municipal, porque entonces ya tendríamos que utilizar otros calificativos más duros.

Los cargos públicos como el de un concejal son elegidos por los ciudadanos. Y su responsabilidad, entre otras y en una escala importante, es la de servicio a esa comunidad para la que se le ha elegido. Y en esta ocasión, el político ha brillado por su ausencia y, a tenor de lo comprobado, ha hecho dejación de sus funciones para con la comunidad de vecinos. ¿Tan ocupado andaba el señor concejal, para no haber podido llamar a este triste periodista? ¿Asuntos importantes de Estado le tenían absorto que ni tan siquiera pudo dedicar 15 minutos, para explicar públicamente que no se iba a celebrar el festival de jazz y los motivos?

Reza (y es una estrofa que me ha gustado desde siempre) un gran éxito de Bob Dylan que "...la respuesta está en el viento". Y nunca mejor utilizada la frase, porque lo que es la sociedad murciana nos hemos quedado sin respuesta, compuesta y sin festival de jazz en la calle. Y nos sentimos huérfanos y sin tutores de la Cultura en este municipio. Porque tengo que darle la razón, sin fisuras, a Sebastián Mondéjar cuando escribe: "El jazz se aprehende con los sentidos del alma en mayor medida que con los del cuerpo. El jazz congrega a un público culto, limpio, pacífico, responsable y sumamente heterogéneo. Gracias al jazz se han escrito novelas y poemas, pintado cuadros, rodado películas y compuesto bandas sonoras inmortales. El jazz ha dado al mundo a muchos de los mejores músicos de la humanidad, algunos de los cuales, no quepa la menor duda, han pasado milagrosamente por nuestro festival. A nivel personal creo, siento, veo y constato que en pocos años nos hemos venido instalando vertiginosamente en una cultura virtual, como de videojuego, una cultura de usar y tirar. Y de tirar, sobre todo, el dinero; un dinero que se le hurta a la cultura real, a la educación y al conocimiento esenciales, de uso y utilidad imperecederos. Cabría decir que existe una razón rudimentaria: es ésa la cultura que se nos está imponiendo; o, dicho de otro modo: se nos está privando de la capacidad de elegir…"

Para mí está claro que desde la llegada al ayuntamiento de la capital de sus actuales gobernantes (ahora con una reválida aprobada por una escandalosa mayoría), el Festival de Jazz en la Calle ha estado en el punto de mira del cierre definitivo. En un primer intento allá por 1995 ó 1996 (no recuerdo bien la fecha) varias voces nos levantamos contra aquella primera amenaza, logrando frenar lo que parecía inevitable. Pero desde entonces a la fecha de hoy, el festival ha ido sorteando toda una serie de zacandillas cual si de una "pista americana" (los que han prestado el servicio militar o son militares, ya saben a qué me refiero) se tratara. Y hasta este 2011, ciertamente que las había salvado con suerte y mucha dignidad. Pero llegó ese gran "cajón de sastre" que se llama CRISIS y con él, no solamente llegó el escándalo sino el motivo preciso para ¿definitivamente, concejal? acabar con nuestro longevo Festival de Jazz en la Calle de Murcia.

Adiós a 30 años de trabajo, de sueños; de gloriosas jornadas para músicos y aficionados o, simplemente, ciudadanos que gustan de la Cultura en general. Ha sido un auténtico despropósito y un absoluto desacierto de los responsables de turno. ¿Por qué Tres Culturas sí y Clásica de San Juan de Dios o Festival de Jazz en la Calle no? Como también indica Mondéjar en su artículo "¿Ha sido exclusivamente por dinero, es sólo cuestión de presupuestos? ¿La consabida crisis? ¿Y el jazz tiene que pagar las consecuencias? ¿No hay dinero, nos hemos quedado sin programador, se han echado atrás los patrocinadores? Pues en vez de actuar tan injusta y arbitrariamente cortándoles el chorro a los aficionados al jazz, recortemos un poco de aquí y de allá, consultemos a los interesados, contemos con los demás, ¡seguro que se involucran!, pero no dejemos morir un festival que ha escrito páginas gloriosas en nuestra historia cultural reciente. ¿Este año no había cien mil, ochenta mil, cincuenta mil euros para organizar el Festival de Jazz? ¿No había veinte mil? Con esa cantidad, Zarangojazz, la asociación de músicos y aficionados al jazz a la que pertenezco, se habría comprometido a colaborar, como otras veces, para coordinar y sacar a flote este año un XXXI Festival Internacional de Jazz tal vez más modesto pero no menos digno de su prestigio y trayectoria. Pero ésa era solo una posibilidad más. El festival podría haberse insertado este año, con menos presupuesto, en el XII Festival Tres Culturas. Eso sí que habría sido un gesto de tolerancia que la ciudadanía en general y los aficionados al jazz en particular habríamos entendido y aplaudido". A lo que añado, ¿Por qué?

Desconozco si mi segundo intento valdrá para algo pero, como decía aquél, que por intentarlo no quede. Señor Gómez: Le invito a que nos explique a los murcianos los motivos por los que no anunció previamente que no tendríamos Festival de Jazz en la Calle y cuáles fueron los criterios seguidos para ello, frente a la celebración de Murcia Tres Culturas. Es tan sencillo como eso. Tan sólo le pido un favor; por usted mismo, la Corporación y los vecinos del municipio de Murcia: NO REPITA DE NUEVO, EL SILENCIO DE LOS CORDEROS.

Suyo afectísimo, el periodista Andrés Garrido (y músico autodidacta).

lunes, 23 de mayo de 2011

JAZZ SAN JAVIER SUFRE SU PRIMER CAMBIO

El XIV Festival de Jazz de San Javier, ya ha sufrido un cambio en su programación. Se ha cancelado el concierto de la Clayton – Hamilton Jazz Orchestra con John Pizzarelli como artista invitado, previsto para el sábado 16 de julio.

Ciertamente y para todos los aficionados es un serio revés, pero los motivos son totalmente ajenos a la organización de Jazz San Javier. A estas alturas, la búsqueda de una sustitución no es fácil y se ha optado por la cantante mejicana de origen estadounidense, Lila Downs, que presentará su próximo disco "Pecados y Milagros" que, junto a una selección de su ya amplio repertorio, conformará su paso por San Javier. Para más detalles se puede consultar la web de Jazz San Javier , donde podréis ir comprobando todos los detalles de última hora.

La verdad que la aparición, un año más, de John Pizzarelli en San Javier había motivado a muchísimos aficionados; mucho más, si tenemos en cuenta que se prometía su actuación como una de las más espectaculares de la presente edición, al estar acompañado por  Clayton – Hamilton Jazz Orchestra.  Una auténtica pena, pero así transcurren en ocasiones las cosas y como en años anteriores, otros conciertos se tuvieron que suspender (siempre por causas ajenas a la organización de Jazz San Javier). El resto de lo programado para ese sábado 16 de Julio queda igual a lo ya anunciado.